¿Qué harías si descubrieras que una IA está usando una imitación de tu voz sin permiso? Este es exactamente el dilema que enfrenta Scarlett Johansson, y su reacción podría desencadenar una serie de disputas legales en el mundo de la inteligencia artificial.
La IA y la Voz de Scarlett Johansson
Cuando el nuevo asistente de voz de OpenAI dijo que estaba «funcionando fantástico», Scarlett Johansson no compartió el mismo entusiasmo. La actriz, famosa por su papel como la voz en la película «Her», se mostró «conmocionada, enojada e incrédula» al descubrir que la voz del asistente era «inquietantemente similar» a la suya.
La Respuesta de OpenAI
El director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, reconoció la similitud con un enigmático post de una sola palabra: «ella». OpenAI afirmó que la voz en cuestión pertenecía a una actriz profesional diferente y no era una imitación de Johansson. Sin embargo, la empresa se había acercado a Johansson previamente para ser una voz adicional para ChatGPT, oferta que ella rechazó.
Tensiones en las Industrias Creativas
La relación entre la IA y las industrias creativas está más tensa que nunca. Actores, escritores y músicos están preocupados por la infracción de derechos de autor y la pérdida de autonomía. Activistas señalan que la tecnología está avanzando tan rápido que deja a políticos, reguladores e industrias luchando por seguirle el ritmo.
La Voz como Propiedad Intelectual
Jeffrey Bennett, asesor general de Sag-Aftra, el sindicato de actores de Estados Unidos, insiste en la necesidad de un derecho federal de propiedad intelectual que proteja la imagen, voz y semejanza de una persona. Sag-Aftra respalda la Ley No Fakes, un proyecto de ley bipartidista que busca proteger a los artistas de réplicas digitales no autorizadas.
Un Precedente Legal
Expertos legales creen que Johansson podría tener una base sólida para un caso. El derecho de publicidad protege la identidad de una persona contra usos no autorizados. Un caso notable es el de la cantante Bette Midler, quien ganó una demanda contra Ford por usar una imitadora de su voz en un comercial.
OpenAI y el Futuro de la IA
OpenAI ha abandonado la voz en cuestión y ha declarado que trabajará en herramientas que permitan a los creadores y propietarios de contenido marcar su trabajo y decidir si quieren que se use en el entrenamiento de modelos de IA. La empresa aboga por el desarrollo de un «contrato social ampliamente beneficioso» para el contenido en la era de la IA.
Conclusión
El caso de Scarlett Johansson contra OpenAI podría ser solo el comienzo de una serie de disputas legales sobre el uso de la inteligencia artificial en las industrias creativas. Con la IA avanzando a pasos agigantados, las leyes y regulaciones deberán adaptarse rápidamente para proteger los derechos de los individuos y mantener la confianza en esta poderosa tecnología.