Voy a ser directo, usar ChatGPT sin que nadie se dé cuenta puede sonar interesante, pero hay cosas que se deben tener en cuenta. Y no, no te voy a soltar el sermón de siempre sobre ética, aunque obviamente está ahí, pero lo que te interesa es saber cómo hacer que el uso de estas herramientas sea más… digamos, «discreto». Entonces, vamos al grano.
El estilo natural es clave
Lo primero que tienes que hacer es asegurarte de que el texto suene como si lo hubiera escrito una persona real. ¿Fácil? Depende. La idea aquí es que no parezca que un robot lo ha hecho. ChatGPT tiene esta manía de ser demasiado formal, repetitivo o predecible. Si sigues esos patrones, te pillan de una. Así que, lo que necesitas es un estilo más natural. Vamos, que escriba como hablarías tú o cualquier otro, pero sin exagerar. Mezcla frases largas con cortas, cambia las estructuras, añade algunas pausas. Nada de textos perfectos.
Un truco fácil: varía la longitud de las oraciones. Unas cortas, otras medianas, y de vez en cuando, suelta una frase más larga, con varias ideas conectadas. Así suena más humano. Si todo se lee igual, ¡mal asunto! Esto es clave para despistar a las herramientas de detección.
Reescribe y mezcla contenido
Este es otro consejo que suena lógico, pero pocos lo hacen bien. No te quedes solo con lo que te da ChatGPT. Toma ese contenido y mézclalo con algo que hayas escrito tú, o mejor aún, con algo que haya escrito otra persona. No tiene que ser literal, solo cambia algunas cosas, añade tu toque, y listo. El objetivo es que el texto termine siendo único, tanto que, aunque una IA lo haya generado, nadie pueda notar la diferencia.
La meta es que el texto tenga menos de un 10% de coincidencia con contenido generado por IA. ¿Cómo lograr eso? Pues reescribiendo un poco, usando sinónimos, cambiando el orden de las ideas. La cosa es no dejar nada en su lugar original.
Corrige y edita (¡No seas perezoso!)
Otra cosa que a la gente se le olvida es que no puedes confiar ciegamente en el primer texto que te da ChatGPT. Sí, es cómodo, pero no siempre sale perfecto. Entonces, lo que te toca hacer es tomarte un tiempo para corregirlo y editarlo bien. Pasa el corrector ortográfico, revisa las frases, cámbialas si suenan raras. ChatGPT tiene la tendencia a hacer que algunas cosas suenen demasiado «robotizadas», así que ajusta eso para que quede lo más natural posible.
Es como una pintura. ChatGPT te da la base, pero tienes que pulirla, darle esos retoques que la hacen parecer «humana». No hay de otra, si quieres que no te descubran.
Pro tip: Si al leer en voz alta algo te suena raro, es que lo está. Cámbialo.
Evita las frases robóticas
Lo que te decía antes: ChatGPT puede caer en frases que suenan demasiado «computarizadas». No sé cómo explicarlo, pero hay ciertas formas de escribir que se sienten… raras. Como que nadie habla así. Eso es lo que tienes que eliminar. Si ves una frase que no tiene mucho sentido o que suena extraña cuando la lees en voz alta, pues, modifícala o elimínala. La clave está en que todo fluya.
Piensa en cómo hablarías tú. Nadie dice: «El uso de herramientas como esta puede producir una mejora significativa en la productividad». Vamos, que lo normal sería: «Si usas esto, vas a trabajar más rápido». Punto. Así de simple.
Hazlo específico y personal
Otro detalle importante: los ejemplos. A veces ChatGPT puede sonar demasiado genérico, como si hablara en términos muy amplios. Si lo quieres hacer indetectable, incluye detalles específicos. Mete ejemplos, cosas personales, algo que suene a que lo has vivido tú, aunque te lo estés inventando. Esto le da más vida al texto y lo hace mucho más difícil de detectar. Nadie va a pensar que un bot te está hablando sobre cómo fue tu experiencia cocinando una receta extraña o lo que sea.
Añade tus opiniones (y no tengas miedo de ser directo)
Esto es algo que casi nadie hace bien. Si quieres que lo que generes con ChatGPT no huela a IA desde kilómetros de distancia, tienes que meterle tus propias opiniones. Y cuando digo opiniones, no me refiero a algo neutral o balanceado, porque ahí es donde se nota más que es un bot. Sé directo, sin miedo. Si algo no te convence o te parece una tontería, dilo.
Por ejemplo, si estás hablando de algo como los beneficios de usar IA en la redacción y piensas que no es tan bueno como lo pintan, suéltalo: «La verdad, me parece que esto no es tan útil como lo venden». Esa es la clase de comentarios que hacen que el texto suene más real. Porque, seamos honestos, nadie habla sin meter su propio punto de vista.
Usa vocabulario más avanzado y natural
Este es uno de los trucos más simples. ChatGPT puede escribir bien, pero a veces le falta «chispa». Entonces, lo que tienes que hacer es meter un vocabulario un poco más avanzado, pero que suene natural. Nada de palabras rebuscadas o complicadas, porque eso no lo haría una persona normal, pero sí puedes jugar un poco con sinónimos y cambiar algunas frases.
Por ejemplo, en lugar de decir algo como «esto es muy útil», podrías decir «esto es bastante práctico» o «es una herramienta que facilita las cosas». La idea es no sonar como un libro de texto, pero tampoco caer en lo básico. Encuentra el punto medio.
Ah, y no te olvides de la gramática. A veces ChatGPT mete algunas frases que no cuadran del todo. Asegúrate de que todo esté bien armado. Si ves que una frase larga se siente rara, divídela en dos oraciones más cortas. Es un truco para que el texto suene más fluido.
Mete imágenes y videos cuando puedas
Otra cosa que ayuda mucho a que el contenido no parezca generado por una IA es añadir imágenes o videos. Ya sé, eso no lo genera ChatGPT, pero tú puedes hacerlo. Cuando añades elementos visuales, el texto se vuelve más dinámico y es más difícil que lo asocien con algo creado automáticamente.
Además, si estás hablando de algo específico, meter una imagen relevante siempre da un plus de autenticidad. Parece una tontería, pero es un buen truco para que el contenido parezca más trabajado y no tan… mecánico.
Utiliza referencias actualizadas
Otro punto importante: referencias. Si mencionas estudios, hechos o cualquier cosa que requiera una fuente, asegúrate de que sean actuales. ChatGPT no siempre tiene acceso a la información más reciente, así que tú tienes que encargarte de eso. Citar fuentes actualizadas le da un toque más serio y creíble al texto. No lo olvides, un texto que suena bien pero que está desactualizado es fácil de detectar como generado por IA.
Eso sí, tampoco abuses de las referencias. Solo úsalas cuando sea necesario, pero asegúrate de que estén bien integradas. No pongas citas gigantes o muy formales, simplemente menciona las cosas de manera natural.
Lee en voz alta (de verdad, hazlo)
Si hay un truco que nunca falla, es este. Lee el texto en voz alta. Si algo suena raro, probablemente lo sea. Es así de simple. Cuando lees en voz alta, notas las cosas que no tienen sentido o que suenan demasiado formales o mecánicas. Eso es lo que quieres evitar.
Si una frase no te fluye al leerla, cámbiala. Hazla más corta, métele un par de palabras coloquiales, lo que sea. El punto es que suene como si lo hubieras escrito tú, y no una máquina. Créeme, leer en voz alta es el mejor filtro que puedes tener para detectar esos detalles.
Dato curioso: Esto de leer en voz alta es algo que muchos escritores hacen, no solo para detectar fallos, sino para ver cómo fluye el texto. Pruébalo, no te arrepentirás.
¿Cómo saber si tu texto es detectable?
Ok, aquí viene la parte más técnica. Hay herramientas online, como Turnitin y otras que usan la API de OpenAI, que están diseñadas para detectar contenido generado por IA. ¿Funcionan al 100%? No siempre. El problema es que algunas veces esas herramientas no son tan precisas como uno quisiera, y pueden fallar, sobre todo cuando el texto es corto.
Entonces, ¿cómo sabes si tu texto puede ser detectado? Bueno, lo mejor es que uses esas mismas herramientas para comprobarlo. Pero, ojo, no te fíes ciegamente de ellas. Si el texto es largo (más de 1000 palabras), las probabilidades de que lo detecten son mayores. Ahora, si estás trabajando con textos más cortos, puede que ni lo noten.
Eso sí, si lo que quieres es pasar desapercibido por completo, Undetectable ChatGPT es una opción que te puede interesar. Básicamente, toma el texto y lo reformula automáticamente, bajando las probabilidades de que una IA lo detecte. Funciona bastante bien si no quieres pasarte horas editando tú mismo.
Las limitaciones de la API de OpenAI
Aquí hay algo interesante. La API de OpenAI no es la mejor para detectar textos cortos. Necesita un mínimo de 1000 palabras para hacer una detección precisa. Si estás pensando en usarla para revisar fragmentos pequeños, olvídate, no te va a servir. Y si te preguntas si hay algún truco para evadirla, bueno, la verdad es que todo depende de qué tan nuevo sea el modelo de ChatGPT que estés usando.
A medida que las IAs avanzan, cada vez es más difícil detectarlas. Así que, aunque la API de OpenAI sea buena, no siempre es infalible. Además, algunas universidades ni siquiera tienen la tecnología para detectar contenido generado por IA, así que depende de dónde lo estés usando.
¿Es posible usar ChatGPT sin ser detectado?
Bueno, todo depende de lo que quieras hacer. Si lo que buscas es generar contenido sin ser pillado, hay varias cosas que puedes hacer. Primero, pide textos personalizados en lugar de usar indicaciones genéricas. Es decir, en lugar de decirle a ChatGPT algo como «Escribe sobre las ventajas del teletrabajo», sé más específico. Pídele algo más detallado o que esté adaptado a tu propio estilo.
Otra opción es experimentar con diferentes indicaciones. Cambia la forma en la que preguntas para que el resultado sea más diverso. ¿La idea? Que el texto final sea lo suficientemente impredecible para que no lo identifiquen como generado por una IA.
También podrías probar algo más básico pero útil: mete puntuación aleatoria o juega un poco con las frases. Sí, suena raro, pero funciona para hacer que el texto sea más difícil de detectar.
Finalmente, si quieres algo que sea prácticamente indetectable, ChatGPT tiene una función de «humanización» que reescribe el contenido de forma que sea más fluido y parezca escrito por una persona. Eso sí, no abuses de esto, porque aunque sea efectivo, si lo usas mal se nota que lo has forzado.
Depende de lo que estés buscando
Al final del día, hacer que ChatGPT sea indetectable es posible, pero no siempre es recomendable. Depende mucho del contexto en el que lo estés usando. ¿Vale la pena invertir tanto tiempo en hacer que un texto generado por IA pase desapercibido? A veces sí, a veces no. Si lo vas a usar para algo no académico y simplemente quieres asegurarte de que suene natural, sigue estos consejos y vas a estar bien.
Pero si lo que buscas es engañar a alguien o hacer trampa… bueno, ahí ya entramos en otro terreno. No te voy a decir qué hacer, pero ten en cuenta que siempre habrá un riesgo. Al final, todo depende de lo que busques. ¿Quieres ser más eficiente sin que te detecten? Adelante, pero con cabeza. ¿Quieres usarlo para fines cuestionables? Eso ya es otro tema.